De pequeño no podía aspirar a ser extremo; su velocidad era reducida y su técnica, tampoco para exagerar. Era un barrio donde se tenía héroes futbolistas pero no era Ipanema donde se podían pasar horas para descubrir nuevos trucos de control del balón.
El juego por los extremos se ha valorado siempre, pero el mago Guardiola dio un sentido a abrir el campo para separar las ayudas que se produce en el equipo defensor.
Existen ideas a las que llaman extremas; no parece que la acepción sea del todo correcta.
Cuando terminan las elecciones, empiezan los narradores que se hacen acompañar de lo que parece que son entendidos. La narradora, en el primer caso empieza a enunciar la alineación de uno de los equipos, extrema izquierda, rusófilos, antisionistas. Las caras, Juan, mira las caras y cada vez que la observas, se la ve un rictus de odio y una masticada de chicle en la que se les descompone la quijada. No se teme que se la pueda desprender de forma fácil, para cometer, como dice el cuento bíblico segun Nieves Congostrina, el fratricidio bíblico con Abel, ella, humilde microfonera.
Su hombre en los estudios, vamos a suponer que se llame Xavier Fortes, la dice, "buena chica, buena chica" y el oyente, antes que continué la maldición sagrada en el campo de juego, espera que el susodicho, podría llamarse también Angels, dé paso a varios comentaristas y estos, como toros enjaulados, estén ya exasperados golpeando las tablas embistiéndose, los unos a las otras, eso si, de forma fraternal; están en los estudios.
Si, no podía ser de otra manera, "desde los estudios centrales", voz televisiva, engolada, deífica, apostilla a, su Macario, lo de ser de extrema izquierda, a ser antisionista, a ser prorruso, más datos apocalípticos sobre Melechón, vaya usted a saber, por ejemplo, hundirá la economía, se irá el dinero, quitará las inversiones; vamos a escribir que como no dice el enviado tarado que nos ha tocado en suerte en estos momentos de nuestra historia; "el que pueda pensar que no me haga ni puñetero caso a mi, que soy miserable que dice que el que pueda hacer que haga".
El caso es que por lo que sea, porque en Francia, no tienen a los Ferreras´s boys, y aquí por suerte de muchos, podemos mantener a La Base, sucede, que empiezan a salir otros relatos. Si, si, si, los cambios de relatos ya están aquí!
La locura de una guerra entre Rusia y Ucrania que ha servido de excusa para que los precios de productos hayan enriquecido aún más a los de siempre, y hecho pagar más, a los que siempre pagan con muertos y dinero esas locuras. A
A esos extremos se les empieza a poner nombre, Mercadona, grandes eléctricas, petroleras. Una guerra que no provocan los ciudadanos, les hacen subir sus ganancias hasta el delantero centro y allí a los ciudadanos, defensores y porteros les atan de pies y manos y aún tenemos que creer a los que nos dicen pero "es por la defensa del Estado de derecho", "es que son comunistas" (Putin, ja,ja,ja y ja).
Por el otro lado del campo, acuden las otras bandas: ¡holi Indra, holi Prisa! con los intereses de la industria armamentística a todo trapo, "rápidos, rápidos" y habilidosos para colocarnos a los pedritos, y antonios.
Se les olvida personalizar las pretensiones de la Francia insumisa, coaligada con Podemos, recuerden "'ataca, ataca Manuel, desde tu toga!"; subir el salario mínimo, pagar las grandes fortunas, si esas de "guerra, guerra", pero no las de las manifestaciones cuando alguien no cumple, que se grita para decir que el pueblo estará en la calle; aquí es con mayúsculas "Guerra, Guerra, Guerra en Ucrania" y genocidios en Gaza y en el Congo, ¡holi coltán", que si no nos vienes, nos recortan.
Ponemos más nombres a los extremos de la Francia Insumisa, acotar los precios de los productos básicos para que no se pueda especular con ellos. Impuestos de sucesiones a las grandes fortunas, para que en una República, no puedan los hijos seguir siendo reyes, ¡oh, oh, oh, pero mi padre, mi madre se lo han ganado!. Si cariño pero el estado le ha dado el soporte para que pudiera acumular esa riqueza.
"Ferrovial, Ferrovial, que bonito se debe nacer". Vaya, se nos enfada porque dice que en la tierra donde ha obtenido la mayoría de las ganancias, a parte de su nacimiento, le cobra muchos impuestos. Emigra, empresa migrante, ¡eh tú el vox de Holanda! que os llega uno, "ahhhh bueno, pero rico, aquí les damos nacionalidad". Se asienta allí, se le recibe como a los migrantes ricos, ¡pero, pero! ¿qué me pasa? ¡qué ya no soy el mismo de antes!. Oh, mis ganancias disminuyen a pasos agigantados. "Cuando salí de Cuba, España, deje mis vida, chanchullos, dejé mi amor, comisiones pagadas". ¡Ya no soy quien era!, me lo digo todos los días.
Esa Francia Insumisa, ese Podemos, ¡oh otra vez casoplón,! casoplón te quiero, afirma Santi; corrobora la Pareja Gallega de sus multiples posesiones, viviendo de la administración.
¡Qué te vas, chico!, ¡aguanta y llegamos los dos a la vez que parece más bonito y si acompasamos parece una coreografía!. Volvamos a los extremos, maticemos. Vamos a construir más vivienda. Gruas y más grúas. ¡No, aún más!;
¡ya vale!, no, todavía más!
Nuestros dos renombrados y señalados extremos, insumisos y podemitas afirman, ¡no majos, no!
la publicidad de la que vivís emisoras, periódicos, conglomerados diversos, no va a ser a costa de especular más y más, y mucho más. Existen millones de viviendas vacías; estas son esenciales para la ciudadanía, no se puede especular con ellas. Si, así te lo dijeron, querido propietario santiaguero para pagar la educación de tu hijo; esos partidos te dicen que por ahí, no; primero vivir y derecho habitacional para todos. Sin especulación, sin gobiernos que pasen viviendas construidas como públicas que se den luego a fondos buitres donde "oh, oh, oh, oh una más y me voy, luego las controlan los hijos".
Te proponemos que exista una gran Universidad Pública, donde no se regalen ¡al rico, titulo!. ¡tu paga, nosotros te lo enmarcamos!; pero tampoco queremos que tu casa, arruine la posibilidad de quien llega de una aldea para poder estudiar.
¿Qué quiere riqueza?, ¡Créala! a especular, Mourinho, con el uno cero ya te puede valer, pero con las ganancias de un trabajador que luego no puede desarrollarse en su vida, porque la vivienda le ha supuesto la mitad de su sueldo ¡no eso, no, majete! ¡con eso no se juega!
Así que cogen los Alsina, Ferreras, y los del underground pordiosero y te mentan como de extrema izquierda y todo porque se extasían, o más, y dicen
¡ahí que bonita mi publicidad, mis cientos de millones perdonamos ¡oh, Herrera!, háblame del mar, vocachanclero.
Ey, ey, ¡mi querida España! que me escucha, asimila, se indigna, mientras yo mercadeo: ¡ Al rico insulto, mentira, cafrada y balandrona!, págame, págame mi paguita de Publicidad y yo gritaré a toda impostura, a toda desvergüenza
¡Lo que tu me pidas! Rhett, te daré lo tu me pidas
y luego, toda esa prensa, apagados los micrófonos, fuera de las máquinas impresoras, cegadas las cámaras. Ante un cielo rosada, con vientos de guerra, dira
proclamará. gritará, cual Scarlett O'Hara, fiel agradecida a sus pagadores,
"A Dios pongo por testigo, que jamás volveré a pasar hambre".
Y luego, porque existen los Javier Aroca, las Laura Arroyo, los Manu Levin, que les hará saber lo que es la dignidad, estos mismos, tendrán un momento, pasajero, de decencia y añadirán otra frase de nuestra Scarlett
I can't think about that right now, If I do I´ll go crazy, I'll think about that tomorrow"
Pero mañana, voz de narrador de partido, fuerte, segura, tenemos a otros dueños a los que servir, "Más periodismo", si campeón por el extremo de tu amo, campeón.
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