martes, mayo 17, 2016

Deberes

Creatividad entre horas

Largas mañanas, donde yo, a lo mejor, me siento único para cambiarles el mundo,
palabras emplazadas a las mismas estructuras en las que se adormece el desierto,
¿Quë pasión les desclavará del silbido repetido para sentirse dueños de su canción?
¿Es sólo un gesto con corazón el que les disparará para montarse en las balas a ser?

¿Tanto nos arrepentimos de las calles pateadas?
¿Del tiempo compartido con la pereza creadora?
Abraza infancia los recovecos donde tu buscas ser
Allí, con paciencia apareceran letras, musgos, otros
Serás por encima de tintas que marchitan tu sangre
Benedetti, te hará ser curioso,
Neruda, te apasionará al no olvido
Besa tus sentimientos, sin que te aten

lunes, mayo 16, 2016

Piedras

Dentro, cada una, te exige conocerte
puede uno en justicia, a esta ensuciar
aguas bravas arrastran tus soberbias
leyes para destruir dulces encuentros
tormentas activadas a pozos negros

Caminar por las autopistas trazadas
vigilantes que encuentran las salidas
donde holganacear sobre platillos
balanzas colgadas, libras vencidas
describe libertad sobre sus cadenas

Fango de metales sin palas
Te atraparon ya tus dudas

viernes, mayo 13, 2016

Masculla la casta, mas chilla insonoridades

No se da cuenta, ya chilla
ofendida oía, no escucha
sus oles al menosprecio
los jaleaban en ibexvoces

Expelían trompetas esas diatribas
más su viento, ya, alimentaba ojos
recitaba posibilidades, feliz arrullo
se escuchaba fuera de chiringos,
ahora exudan silentes corruptelas,
antes aparcadas sin juicio social

Noches sembradas de manos
pies desamordazaban costumbres
¿te ofenden las palabra puñales,
tanto como trincaron tonsados?

miércoles, mayo 11, 2016

Ivan, Svetlana y la bandera

Tras "el oficio más bello del mundo" de Josė Marti Gomez, debo volver a "los muchachos de Zinc" de Svetlana Alexievich, como introducciòn a esta continuación en la lectura del libro oí ayer las palabras de Ivan en el,programa de Hora25 que Angels Barcelo dedicò a los heridos o muertos en misiones militares. Este chico español, en su sueño de ser militar desde su más tierna infancia, se había enrolado para servir a sus ideales, y ya al final, conseguido el fín, herido y maltrecho en una misión, había intentado seguir; fue incluso, difícil arrancarle de allí; tiempo después ya viviendo la realidad de la  falta de apoyo recibido, siente el desgarro de la toma de conciencia del maltrato por quienes son depositarios de aquellas telas de tanto valor para muchos adoradores de los símbolos.

En la escucha, entre brumas, se me abría la memoria de la angustía de las primeras 100 páginas del libro. Si fuera actor shakesperiano estaría con Macbeth en el cementerio, corroido por los gusanos anidando en rey y sus vasallos, asesinados para intentar reflejar la quemazón que me producen las vidas del soldado, ilustrado que creía en la Patria y se descubrió soñando, entre equilibrios por letrinas ponzoñadas por las miserias de los mandos y los odios de los invadidos vendiéndoles venenos; ó la enfermera insonme entre gritos, entre ausencia de recursos y entre necesidades nunca satisfechas ante los besos de la muerte.

Y hoy, si con miedo porque no me da consuelo, leo diez páginas para volver a sentir el veneno que me alcanza la mano inmóvil de la belleza amada, con un soldado, que huye ante los despiadados "él", a los que quería salvar y ahora le llaman asesino en las conversaciones de parques y autobuses, o un comandante errático, sin identidad porque tiene inyectada la espina que fluye en vena desgarrando sus arterias; o a la empleada, que mira la destrucción moral de quien quiere solicitar una flor que le anule los recuerdos.

O, el mal que siempre gana, porque tiene la semilla de la ambición que siempre vestirá al miserable y este calculador mercader, las transmutará en banderas que subyuguen, a los que engrandecen las alegrias cotidianas de quien es fiel a su sudor.

Homenaje duro de Svetlana a la realidad desnuda. Leí que una madre había reprochado a Alexiévich que al menos les hubieran dejado vivir entre las coronas de la gloria, sin darse cuenta que las espinas de la mentira la desangraban. A la madre, no sé si le llegará el consuelo de un beso desprendido en nuestras flaquezas

martes, mayo 10, 2016

Si, intraquilidad por el fin del mundo conocido

Porque en él admitiamos que el orden venía de quien obtenía beneficios
Surgía la comunión de su visión de algo grande que edificaban fuera
Nacían las grandezas del glamour en pieles tundidas por sus herramientas

Ahora, la comodidad será concebida de nuestro concienciado respeto al otro
la unidad nacerá al hablar acodados en cien mil barras de horas de barrios
la belleza crecerá entre el compartir nuestros diferentes  duros esfuerzos

Crecieron siendo inmisericordes en el miedo generado
Naceremos entre las incomodidades de diarios reveses

Y seremos, cuando nos demostremos que Podemos

lunes, mayo 09, 2016

Martí, paseos con sonidos

Cuando leo el libro de José "el oficio más bello del mundo", Ed. Clave intelectual, disfruto del pintor que se enfrenta al lienzo, con los miles de tubos de colores utilizados.

Leo frente a una ventana que es abierta para el flujo entre los protagonistas y la comprension de mis
razonamientos entonces cristalizados conc vidrios de mil tamices.

Visité su afabilidad en el Kursal, sabiendo que en su mano, mirada y palabras estaba sentía el calor del ser que derrama las aguas de los mayos recorridos en miles de conversaciones con bocanadas de corazón, picardías de pimientos cenados en fabulosas noches de cotidianedad y vapores huidizos de conversaciones negadas ante las lógicas de jueces que necesitaban la malta en las aguas salvajes de los poderosos caños conducidos.

Quise ser huidizo a la mirada del ser humano que se apartó para ser fiel a un amor que perdió el destello en las quebradas donde cayeron dos hijos, cuando entra José a hablar sobre la justicia y los que a veces ser han encerrado para teorizarla, como quisé esconderme, por volatiles noticias cuando Jordi Évole, me presentaba a Romano; no, no pudé, sangra la razón cuando la podedumbre ser instala en el servicio al ciudadano, entre los que fueron ataviados con los birretes de atención al ser humano.

Y guardaré el libro de José Martí para la cabecera en la que he querido entender actos de los que no tuvé acceso a sus látidos

jueves, mayo 05, 2016

Árbol envenenado

Árbol de la vida, odiado por ser tú

Creces en tantos sitios unicos
molestas porque quizas, vives,
ajeno a los intereses del odio
pero eres sustento para nidos
de vida que achican opresiones

Admitimos a las cizañas creadas
callamos por la tozudes de hierros
eran ácaros que apolillan sueños
y preferimos que nos vendieran
escondiendo la muerte que nos crecía
vente, si salé tu surcos, labremos

Si amo la planta en el sudor,
estara sin tierra, si de ti huyo
al admití ponzoñosas monedas
que hielan letras que fluían
por manantiales de milenios
que nos arrebatan esbirros

Hoy vienes, con tu mano sobre mi lomo

Oigo la radio, si, si, tu te acercas a mi ciudad, con tu diferida medium. Alemania, bonhomia y paseo para asegurar el voto abducido por la falsa tranquilidad que nos dan tus cimientos podridos por la corrupción.

Cogeré el agua por el que fluyen piraguas para la placidez y saldré a arroyos, manantiales y charcos y allí nada será fácil, veremos nuestras inmudicias, errores e imposibilidades, pero en el agua, lanzaremos las cuerdas, nos pondremos los chalecos y descenderemos unidos entre piedras, saltos y remolinos porque sabremos que en el peligro nuestra fuerza es la implicación y darnos la mano que tantas veces rebeldes a los pasos, quieren caminar a tantas diferentes certezas para superar las corrientes de la eterna conformidad dominadora

En los papeles, en las ondas, apareceras inmaculado, como la piel del abatido elefante, que tiene sus entrañas podridas.

Votar, en su imperfecta pequeñez, es el apoyo para sobresalir ante las manos zombies que justifican los malos olores para seguir hundiéndonos bajo el manto que nos aplasta para desaparecernos ante algunas de nuestras riquezas, una la dignidad.

Al final del día, veré tu foto entre estudiantes, colados entre las mordazas. Foto para lucir juventud, como la señora que se elevaba en una foto con piraguistas, para demostrar trabajo, cuando rasgados sus fondos, se veía la podedumbre de sus egoismos. Bellos fondos sin alma

Siameses y mercader

Siameses y mercader
Zaida, Fernando y