Tengo una foto sentado en el regazo de la estatua de Bertolt Brecht enfrente del teatro donde representó parte de su obra, Berliner Ensemble.
Me hubiera gustado ser un titiritero y haber enamorado a aquella Musa, tan esquiva, tan apasionada, tan ausente, como las otras ocho; pero siempre fuí inconsistente, en lo primero y en lo segundo, soñador sin balcón en el que ofrecer miedos
Si aún estuviera a tiempo y me pudiera subir a un escenario; con la inestimable ayuda del profe Julio que me enseñara a utilizar la voz que tanto, se me quiebra, le diría en estos días, que ahora si había comprendido a donde quería llegar y que quisiera saber usarla, para mi debut en las tablas, primero con el poema de Brecht:
General dein tank ist ein starker wagen General su tanque es más fuerte que un coche
Er bricht einen Wald nieder und zermalmt hundert Menschen.
Él arrasa un bosque y aplasta 100 hombres
Aber er hat einen Fehler: Pero tiene un defecto
Er braucht einen Fahrer. Él necesita un conductor
General, dein Bomberflugzeug ist stark. General su bombardero es muy poderoso
Es fliegt schneller als ein Sturm und trägt mehr als ein Elefant.
Vuela más rapido que la tormenta y carga más que un elefante
Aber es hat einen Fehler: pero tiene un defecto
Es braucht einen Monteur necesita un piloto
General, der Mensch ist sehr brauchbar. General, un hombre es muy útil
Er kann fliegen und er kann töten. Puede volar y puede matar
Aber er hat einen Fehler: pero tiene un defecto
Er kann denken. él puede pensar
El alemán, lo erigiría para recitarlo, sería mi elección, por ser de él y de Karo, la hospitalidad y bondad que siempre llevo en el paladar.
y luego escucharía a Adolfo Celdrán cantar su versión.
Y cuando una joven inquieta, me preguntará que pienso de las guerras
les repetiría los dos versos finales, sobre el ser humano y a su capacidad de guerrear, añadiría
pero tiene un error
Él puede pensar
Allí, en el escenario taladraría el aire para, en este, enmarcar las palabras antibelicistas de Brecht, si general, si sus muchos soldados pueden matar y transportar en sus aviones miles de bombas, pero todos necesitan un ser humano y este, llegado un momento puede pensar.
Pensar para no aceptar las mentiras de los mercaderes de las guerras que manipulan las informaciones y tratan de quebrantar los hechos.
Seres que utilizan a sus dioses esclavizados para justificar su sumisión al poderoso y a su dinero. A crear un orden donde nada se levante.
Donde la mentira este justificada y donde medios, como decía ayer alguien, como Carnecruda o LaBase, hagan reflexionar y poner a cada uno en su sitio. ¡Qué dos días de exhaustivos y valiosos análisis han tenido durante estos primeros días de esta semana!
. Por mucho que sus voceros y botseros traten de mercantilizar lo no sucedido.
La persona empieza a transportar bombas cuando deja de pensar y va admitiendo que su mente sea cargada de ruedas de molino.
Bertolt, ¿tú crees que si me subiera a la barandilla del río podría sentir la congoja de la guerra?
Humanos blancos, que sólo quieren blancos
con una misma religión que ¡oh, nuestro dios!
¿por qué proclamas?
ama y cuida a tu prójimo, sin distinción
Habrá que subirte al Gólgota
otra vez, nuestra razón
es tu sumisión
Caridad
en odio:
guerra.
Mirar
amar
beso
PAZ
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