CTXT: Noam Chomski mantiene viva su búsqueda
Si pudiera ser lógico con mis actos cotidianos, cercanos, de respeto a la gente con la que me rodea pero que a la vez, sé que no coincido, me haría harapos las dignas ropas que visto.
Si, a ese señor al que le digo buenos días, al que le doy un libro, un buenos días, y una piruleta le han dicho a los que creo que él vota, que durante 10 días este pais va a estar de luto, por todas las muertes que ha habido en esta inmisericorde pandemia; a los que yo voto, no les debiera permitir que se crean con derecho a saltarse ese tiempo de duelo. Vestir de luces, y marcar un tiempo de duelo diferente, porque los muertos no nos pertenecen ni a ellos ni a nosotros
No estoy en un tiempo para ver como enemigo al que bebe agua en la misma fuente que yo amo.
Es un tiempo, que el orden no debe estar basada ni en las armas, ni en las violencias ejercidas por quienes tienen concedidas la salvaguarda de un equilibrio en la sociedad. Yo no debiera permitir la mentira, no debiera olvidar (obviar) que de Trump, un periódico tiene acreditadas 22 engaños diarios desde que se le sigue o está de presidente; la mentira ante mi mujer, mis amigas, mis alumnos, desde el primer momento mina la confianza para la relación futura. ¿Cómo puedo conceder mi voto a alguien que dice que su referencia política es ese presidente mentirosa?.
¿No me doy cuenta que me estoy destruyendo en mi esencia?, una patria con boca de dientes postizos blanqueados, un himno con notas engañosas, una bandera que hilos que se deshacen
Mi espíritu está contrahecho si doy puñetazos al saco de mis actos queridos: confío en una sanidad pública que tenga todos los medios suficientes, para que sea más eficiente, más rápida, más humana y sin embargo postro mi conciencia a alguien que entre sus fines tiene darle a la empresa privada la gestión de algo con lo que no se debe especular.
¿Cuándo entregué el cuerpo de mi mente a los impostores que maquillan la libertad de elección de centro en un apartar a seres humanos que no les vienen bien o no les son rentables en una mezcla con seres que reclamamos exclusividad?
Porque ahí está la clave, no valoro la educación pública porque todas tengan las mejores condiciones y las mejores oportunidades, sino que me he dejado llevar por yo, primero y los que vienen detrás que se apañen. ¿Cuando empecé a deformar mi mente, con la acción de mis hechos?
A veces, si por casualidad me entero, a través de mis medios guía parece raro, que los discos duros donde estaría la contabilidad de mi partido votado, ha sido machacado en veces suficiente como para que cualquier chip haya sido seccionado en, al menos, tres veces su médula espinal y por tanto, su posibilidad de existencia haya incluso perdido la capacidad de migrar a los cielos de la informática, ¿cómo puedo magnificar una mentira elaborada por una policía de parcialidad, y por tanto, apátrida porque olvida a más de la mitad de sus ciudadanos, que habla de unos pagos que no han sido y una dependencia que sólo podría haber descubierto de las empresas que figuraban en los Excels que de forma tan escrupulosa amartillaron con el voto mío?
¿Estoy yo contrahecho?, soy capaz de analizar mis limitaciones para percibir los propios fallos y contrastarlo con las certezas que podrían estar en el otro lado.
Me imagino que sí; lo mismo no percibo en quien trata de repartir la riqueza para que llegué a la casa donde nací, que el rico no debe pagar impuestos, ni el de herencia, porque esa sociedad se iguala por mantener lo que ha sido desde un tiempo, a veces inmemorial, a veces, de rapiña.
Si creo en una patria, ¿Por qué no le concedo parte de su existencia cuando a mis hijas-os les lego todo lo que ya les di y todo lo que ya no voy a poseer, por emprender un viaje sin equipaje? ¿No está el estado dándole consistencia y continuidad a lo que yo dejo? El Estado, mi Patria que debe subsistir no la puedo hacer sólo entregadora y no receptora de los bienes que ella afianza para un futuro conjunto
Si, encuentros contrahechos para una convivencia que ha existido siempre y que debiera afianzarse en lazos de proximidades, mirando a los ojos a los dioses vendedores de odios para ellos subirse a los altares que nos arrodillen
CTXT. Gerardo Tece, vencer mi ilógica
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