Siempre me pareció interesante que comprendieran el valor del momento de la entrega del testigo. Como en el famoso combo, saber leer tu velocidad con la de tus compañeras y el paso del famoso "palito", como momento clave en la interacción dentro del grupo
Otra cosa fue cuando el propósito fue hacer un simulacro de carrera; aquel enaltecido mozo miró para atrás y emprendió la veloz carrera tan pendiente del compañero que venía que no intuyó lo que se le venía delante, un poste ajeno a tantos jaleos juveniles, para susto nuestro y herida, grande, de él.
En días como hoy, se nos va Pepe Mújica, así que deja un testigo que nos tenemos que repartir entre muchos. ¡Joder! ¡Qué manera de estar por aquí!; recibiendo palos, como dijo y dando píldoras para ser feliz y ninguna de ella llevaba química, ni los amaños que nos contaba Nieves Concostrina sobre de quienes dieron origen a la palabra estraperlo. Ni por asomo se nos habría ocurrido pensarlo por ahí, pero ya les dije a los padre y madre de un joven, esta Nieves es mucha mujer, como para producir un fuego en el necio por mostrárnoslos desnudos de todas las alharacas que algunos creen que es tradición; también lo es para producir una inundación de abrazos, por deshacer los témpanos de la inhumanidad y mostrarnos su sensibilidad ante tantos casos de violencia hacía los niños, los desfavorecidos, los republicanos apartados en cuneta y esa monarquía que es un cáncer que sólo una sociedad puede aguantar, entre tantas canalladas recibidas.
Quienes le trataron tienen que estar abrumados por la sencillez en el trato de un ser que fue presidente de un país, después de haber pasado por la cárcel durante una dictadura.
¡Qué raro! ¿verdad, Raúl? se nos presenta un tipo con unos grilletes y ahí delante tiene un escarabajo y no sólo no lo pisa, sino que se monta en el y nos conduce con la velocidad suficiente para reencontrarnos con nosotros mismos. Ya nos dice, el peor enemigo de un pobre es otro pobre que busca satisfacer al rico, para que le acoja a su vera.
Es como si una tal Yolanda fuera tan miserable que hubiera vigilado a su compañero de partido, también pobre, para que el rico la acogiera en su seno para hacerla morder la buenaventura de la traición. ¡Qué vida! Yoli; emputecerla para que sólo seas digna de que tu amo te pase la mano por el lomo y los sicarios te den cancha, eso si pensando para su fuero interno, ¡vaya panda de mamarrachos que somos los unos y las otras!, sabiendo quienes arrojan los huesos y mordiendo a diestro y siniestro, si este nos los manda.
Así que por aquí anda, el uno y el otro; a este le dio tiempo a escucharse en las mazmorras y también la edad, le hizo posarse sobre nuestro altar diario y darnos la medida del valor de las cosas para no perdernos en lo prescindible; al otro, que ha escuchado al primero y también a Eddie Veder y para mi que, también, tiene algún otro chanchullo en el que involucrarse para vergüenza mía, ya me diría: aparta, habla, cuéntame pero no intentes ayudar.
Cuando amamos
Somos luz
ey, you got a light?
Yes, and we love it; allí en las noches estrelladas, nos la representamos en aquella, o no, en aquella otra, o la que se quiere fugar
Es una trampa que nos hacemos, nos decía Pepe, para quitarnos falsas esperanzas; ya no volverán ni el uno, ni en el otro, pero quedan en nuestras entrañas y actos; son parte de lo que aspiramos a ser y de lo que queremos para una sociedad más humana. En los días de tinieblas, no esperamos apariciones, sólo desear vivir para celebrar ese tiempo compartido que diluye la densidad de los nubarrones que son manejados y nunca terminarán de marcharse como la permanencia; amarrado por los abrazos de los que aprendiste
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