Se queja, un insigne escribidor que al nombrarle, un jugador, Unai Simón, le ha puesto en la diana.
No sabemos si es escuchado por cien, mil o veinte mil personas, este famoso, también, locutor. Cuando lanza las diatribas en las que daña la imagen de un profesional del fútbol, lo hace con la impunidad que le da la libertad de expresión, pero sin las consecuencias que deberían tener las opiniones herradas y las faltas de consideración.
Cuando alguien se le niega a responder por estas razones y más, él es la víctima sin que el jugador, educado hasta la inmensidad, le recuerde sus errores, sus humillaciones que le tienen hay desde hace años.
Juegan con el doble rasero, de parecer divinos y pitonisos en sus magnificas opiniones, venidas de una voz de enviado celestial; que tiene derecho a faltar en lo personal y ante una negativa a responderle; volver a sentenciar, divino, que él es el castigado y el ofendido.
Profesión esta de periodista, amada, magnificada y necesaria; algunos como Xabier Fortes, Pedro Vallín, Antonio García llegan a ella habiendo obviado que en el frente, tienen, no a trolls; sino a seres comunes que les cuestionan por su falta de ética y objetividad. Sentenciando sin que hayan dado la oportunidad al otro, cuando lanzan sus flamígeras anatemas.
Volviendo a lo importante; es bonito que el equipo femenino del Real Madrid se esté enfrentando en Europa a algunos de los mejores. Pasará lo que tenga que pasar en la vuelta; pero como se escribía en la semana pasada, jugar contra el Barcelona de las sublimes Aitana, Graham, Alexia tiene que ser el mayor deseo que puede tener una jugadora, después de eso, si existe trabajo, entrenador aplicado como es Alberto Toril, y calidad en las jugadoras, los demás equipos estarán humanizados.
El círculo de aprendizaje, como el de quintas se irá cerrando.
Y si, a la vez, en reportajes, esos divinos-as opinadoras seguirán ejecutando al entrenador, como si lo fácil fuera siempre eso y no darse cuenta de donde viene un antológico Barcelona, con unos cimientos firmes y humanos y un Madrid, nacido hace 5 años.
Es bello saber que aún lejos, todo se acerca y el próximo Domingo más, más aprendizaje con el Barcelona y el miércoles a soñar.
Es respeto al trabajo, no tener la necesidad de vender noticias, como ahítos de ganancias, como esos mercaderes que vendían porciones mágicas para el pelo, a algunos que para qué, si hace tiempo que no tuvo flequillo
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