sábado, marzo 22, 2025

Can you feel my love

 Esa profesora se toma una pausa. Les ha explicado "knocking in the heavens door".

    Respira y su mente se aleja a un día concreto, un espacio determinado y él, subido en la borda de un barco que se dirigía a altar mar.

     Ella estaba en la orilla de la playa, no se había querido acercar al pantalán, le miraba fija como intentando leer el catavientos de la melena al viento de su amante.

      Una alumna se acerca con alguna pregunta; era especial ese ser, pregunta, mirando con discreción un comienzo de lágrima; 

      Si, maravilloso, a veces miro a los cielos por si alguna estrella le puede guiar por la ruta de vuelta

       Yo, profe, una vez tuve una shooting star, atemporal; le habíamos quitado el tiempo, para encontrarnos en nuestros espíritus. Sentí que no podía ser de otra manera, pero de alguna forma le amé.

        Le deja una hoja y donde ha dibujado las miradas que se cruzaban y el tiempo tan lejano, tan eterno

       La profesora atrae hacía sí aquella tarjeta como si en ella estuvieran los abrazos de la ultima noche, cuando destrozaron todas las vallas de los cuidados porque sintieron que aquel tiempo era tan infinito como el placer en el que se encontraron.

      Van llegando, otras hojas, entregadas entre ruidos, voces y ojos que explorarían hasta las entrañas de las tierras. 

       Coge la ultima redacción y pasa el dedo por el dorso como el placer que le estallaba cuando la recorría todo su espinazo hasta juntar yema y besos, un extásis donde creía morir.

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