¿Cuántos nos miramos al espejo cada mañana y nos decimos?:
- Tengo una familia a la que alimento y a la que quiero
- Cumplo con mi trabajo y no discuto lo que me mandan porque ellos tienen otra responsabilidad mayor
- Asisto a la reuniones sociales donde acepto el orden de lo establecido
- Escucho lo que me dicen los medios de información porque por algo ellos están ofreciendo las noticias.
- Temo a quienes rompen las normas con las que nos regimos en la sociedad. Que las podría resumir
o Una gran patria común
o Símbolos e himnos que resumen mis sentires
o Monarquía que recoge el equilibrio que busco en la sociedad
Y con esos ideales tan nobles con los cuales me invisto, ¿Por qué existe gente que?
- A la patria, la engañan no pagando impuestos o manejando dinero negro
- A las personas como yo, no les pagan todo el salario prometido
- En empleos temporales, a sus asalariados, les conceden condiciones peores que a sus animales
- Especulan con las casas para que las condiciones de entrada sean más difíciles y sus formas de vida, atadas a hipotecas, más esclavas
- Digan “libertad de elección de Centro de estudios”, cuando ellos saben en sus propias carnes, que quiénes entran en esos lugares, los quieren sin inmigrantes o alumnado en dificultades.
- Ocupen casas con entidades como la SAREB o los bancos que especularon antes con los terrenos y ahora con los pisos que vacían para mejores tiempos.
- Sueñen con políticos que dan el bien común Sanidad pública, a fondos especulativos.
- Admiten que una monarquía sea ejemplo de comisionistas en nombre de una entidad: España, que han usado como fuente para recibir sus porcentajes.
- Siga sin cuestionar a quien le hace temer la gente diversa con la que, al final, tiene que llegar a acuerdos para fines comunes.
¿Cómo he llegado a achacar y a odiar? A quienes
- Defienden las condiciones del trabajo en cualquier circunstancia
- Viendo la falta de recursos en la escuela pública; quienes la defienden
- Muestran la corrupción de las grandes empresas o grandes imágenes
- Denuncian la masificación ficticia ciudadana y me hacen tener miedo a la ocupación de mi casa; cuando han ocupado mi dinero y han favorecido los pisos “turísticos”, tan poco solidarios, tan especulativos, tan problemáticos para las personas que las están de forma habitual
- Marcan que hemos amado a una familia “profesional” de la comisión porque eran buenos representantes de las esencias de un país. ¿Especular?
¿Cuándo seré capaz de comprender que quien me brinda la información puede no ser todo lo objetivo y “bueno” que soy yo?
¿Cuántas veces seré capaz de hacerme un peón del especulador, del rico en sus gritos, en sus odios, en sus señalamientos porque estos me ponen la capa mágica de los símbolos e himnos que ocultan lo que antes, quizás, no quise llegar a escuchar?
Heroicos cómics, capas inhumanas. Personas al descubrirnos
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