jueves, diciembre 25, 2025

La vivienda, sueño, la vivienda

  Me puedes estar diciendo que que guay, el niño, la natividad. 

  Oh! Que maravilla, uy! ¡Qué bonito el niño! pero ¿y dónde vivo?

Joder, que no paro de decir tacos, osea 

  ¿Qué vas con Herodes? O¿con Xabier García Albiol! Que manda matar o quemar

    No me pongas el belén en el instituto y vayas por ahí,  señalando al diferente o admitiendo que un selectivo colegio escoja sus clientes. 

    ¡Qué leches es el belén para ti!

     Un nacimiento 

     Ah si! ¿De alguien que iba por ahí seleccionando?, ¿de alguien que usaba su libertad para quitar al prójimo?

     El niño esclavo, utilizado para lavarse sus miserias el poderoso. Como vas a creer si robas a la sociedad. 

     Si votas a ese ladrón, ese niño ¿no está en Sudán para sacar el coltan que te ayuda a ser cool poniendo a un asno como mula.

A un especulador como piadoso, a un mentiroso como salvador, cuando roba recursos públicos que tiene a la gente sin vivienda, en la calle, mientras el que señala, esconde al acaparador. 

  Constitución la llaman ahora a la pretensión de convivencia, pero la controlan ellos, se la meriendan ellos. Puro mercaderes. Acaparar una exigencia de la misma, por ensalzar el libre mercado. La gula por encima del frío.  Los palacios de ladrillos quitados a los belenes.

Las agresivas feliz navidad,  como si aquella hubiera existido y no las de los siempre necesitados que tienen que formarse en un mundo mas justo y son arrojados a los estercoleros por los criminales egoístas que nos taladran con sus medios comprados acerca de su belleza, pura fachada para el latrocinio

  Y los que buscan no molestar,  siendo gustosos al poderoso y robando la esperanza al nacisturo eterno 

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Siameses y mercader

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Zaida, Fernando y