Camina la botella, portada por una voz que la dirige como otrora desde un monte dieron las directrices para coger las llaves a la primera de cambio, cuando se sabía que las puertas, aún, estaban por existir.
No hay nada como crear una necesidad, como aquel señor que se tumbaba en la hamaca para recibir rayos UVA, en el desierto. A lo mejor es hablar por hablar pero me surge la duda acerca de lo que tendrá que ver el mosto, con el señor Pérez que se dedica a las trufas.
Por contra, el señor Ciomeai no duda en decir UUUUhhh, aunque sea sólo por no echar en falta la vocal caída de su nombre.
Pero es mentarle el vinagre y empezar a renegar; que sí se tenía que tener más paciencia con la fermentación; que aquella derivación podía haber sido para tomar una carretera secundaria pero claro, por ahí andan Bru Rovira y Valentina Rojo que ellas las toman casi todos los amaneceres si es que el Sol se decide a asomar en Antequera, pero quítate que casi tienes que estar en Tarifa, en esta época más baja, pero no hay nada que un buen bronceado, sea del desierto o de los "uvas" que eso no lo hemos resuelto, decididos a mantener abiertas, los mayores niveles de incertidumbre que se apoya en "Arlo Pas".
Por cierto, esperaba ver la Luna pero el agua acecha y esta que se siente muy intimidada por su nula percepción en medio de olas de varios gramajes; de grupos de gotas con un poco más de componente del líquido, permiten caer en un sopor al que te ha llevado que te dejen ir a tu propia casa, con la condición que tu la limpies y aquello no se convierta en "Ramona, tócame aquí el bajo de Tedeschi, por si encuentro el SI que me negó aquella novia, ya en el altar, donde minutos antes, una cabra Montesa había logrado escapar con más broma que éxtasis, pero ya sabes o te acomodas o caes con la barriga sin tren de aterrizaje, con lo cual "el tete" que anda escondido, cada vez más pues de pequeño era tan osado que parecía prominente pero ahora se dedica a verlas venir. Aunque sabes, desde hacer tiempo, que la tabla de surf necesitaba un lijado, a vida o vuelos.
Por ahí, entre granos, AC/DC nos desboca, aunque sea por el oído, pues ya sabes que a buenas” tendereras”, el sol todo lo seca mejor; elemento clave para que sel sonido vaya saltando de escenario a camiones llenos de vibraciones
No hay comentarios:
Publicar un comentario