domingo, noviembre 23, 2025

La bondad en sangre

  Si el señor se dirige a ti, bueno una audiencia, con sus años y su cabellera plateada, te empiezan a temblar tus principios y te preguntas: ¿soy un malvado?.

  Habla pausado, te adormeces y pum te suelta un navajazo, perdón muy exagerado, cientos de martillazos, no por favor, a tí no; o sí, porque te han robado tanto que tu pagas todos los excesos por ese saqueo continúo. 

    Esa voz firme, encorbatada, exploradora en todos sus privilegios no siente que no hayan respetado a un juez. 

    ¡Por favor, por favor! le hemos quitado el marrón de tener que ver toda una estructura criminal de pago de comisiones. Una mente pura, no debe ver esas cosas.

      ¿Respeto por los jueces?

      Por supuesto, fíjate, Garzón metiéndose a investigar en la cárcel, lo que nuestros presos hablaban con nuestros abogados. ¡Por favor, por favor! las de maldades que podría haber escuchado.

     Había que quitarle de la carrera judicial. Se hubiera bestializado; existen cosas y hechos que una mente justa no debería escuchar nunca.

     Mírenme, ¿no les doy tranquilidad?. No me vayan a comparar, ¡por favor, por favor! con un psicópata como Hannibal Lecter. No sean vulgares.

     Es de noche, ¡apaguen las luces, siempre por favor, soy así de educado, por favor!

     Los chicos van a salir a la calle. Un juez, se lo permite. Tanta y tantos jóvenes desorientados por las noches; da miedo, bengalas ¡pues claro! 

   Deben saber por donde van y no caer en la ciudad, pecaminosa, si vagan por la oscuridad

   Así que si señor plateado, como no respetar a esos togados, aunque busquen de forma prospectiva y en una lista de ladrones no averigüen quien es M. Rajoy. 

   Gracias por esos sabios consejos. como decían estos chicos, autorizo un juez y usted debía escuchar con los ciertos años que ya le visten: Pedro Sánchez, "un tiro en la nunca" que quiere decir que este hombre tiene poca sangre y por eso: nunca debiera gobernar.

    Es tan bondadoso, me refiero a mí; así que ese chico Pablo, si el que mis compis llamaban Iglesias y el burro, porque, a veces ese pedrojose se pone muy burro, le metió una pistola en la boca. "si yo me metí lo que fuera, no lo van a hacer los demás"; me tenía calado y era muy vasto en sus palabras que condenaban a esos jueces "luminarias", luego fuera del micrófono era muy educado; no como yo, que lo soy en todo momento.

     No eso no es ser cínico; tengo la bondad en sangre, como "el cara odio", mi colega que buscó salvar a todo un país, de un dictador como Sadam.

     Manamos bondad y ayudas a quienes no los reconocen t 

      Nos muestran en los altares de la portada, ¡qué pagamos y bien pagamos! son insaciables. De los nuestros, pero insaciables

  

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