lunes, marzo 13, 2023

Planchazo

 Se puede estar loco de atar, como Gavi metiendo la cabeza en una disputa contra un pie, se puede estar loco desatado, como puede serlo Ignatius Farray, destruyendo un ecosistema de placidez. El primero, se lo disputa a una pierna que quiere jugar, construir; José Ignacio es la sensibilidad y la reflexión, vestida con clavos.

  El planchazo es salir a un ecosistema cumpliendo las normas, que quienes dominan la sociedad, no las cumplen. 

   Vuelvo a Brecht, sentado en su estatua a la puertas del Berliner Ensemble. Le he llamado a sus puertas, porque escribo para desnudarme, pero el frío adormece las letras. Me pasa las palabras por la frente para aliviarme los tornados de odio desatados; va a la raíz para que comprenda que lo inmediato daña, atemoriza, brama, pero "de qué sirve decir la verdad sobre el fascismo, que se condena, si no se dice nada contra el capitalismo que lo origina". 

  Roger Waters en 4:50 go fishing lleva al paroxismo un saxofón, enloquecido por la falsa belleza de una vida que no puede huir de las carreteras a la que siempre le devuelven los actos. Sueños guiados por ángeles esclavizados en posters comercializados en las tiendas turísticas.

   Visitas guiadas, con seres encorsetados por luces y sonidos que deslumbran en sendas a las que te atas con sus cuerdas y permiten esconderse al dinero que activa círculos que originan tormentas, maremotos con tsunamis, donde siempre se hunden las chalupas y lanzan salvavidas con identificador de sumisiones los aún más crecidos transatlánticos.

  Héroes que se arrojan a los pies de otros para quitarlos su paso, o a la continencia del dominador para destrozar nuestros apriorismos y Beltolt que manda hacer sonar el saxo para que vuelva, ahora que me salen más preguntas

No hay comentarios:

Siameses y mercader

Siameses y mercader
Zaida, Fernando y