Sucedía ya hace una eternidad, en un lugar alejado del mundo, una olla donde podría encerrarse el fin del mundo.
Era una conversación intrascendente entre seres que coinciden en un espacio, en unas horas determinadas, casi por accidente.
Los temas podían ser de lo más intrascendentes del mundo como el último tema que se planteó y que cerró el bar y casi, el haber vuelto a coincidir en el mismo lugar
Uno de los interlocutores investido de un aura, que nadie podía esperar, descartó en un primer momento al partido gobernante, sin darse cuenta que ese era el tutor de lo que diría a continuación.
Descartó a un corrupto Partido Popular, que siempre parecía que le había acogido, pero que una sobrevenida decencia intelectual parecía que le podría alejar de no apoyar un ser que en su fuero interno, sabe que sobrevive por las mordidas de las grandes empresas, estas saben que es su partido y quien les quitará, sin ningún complejo, los impuestos, con el mantra de que eso genera empleo.
Luego introdujo como un vómito un partido que habrá de patrias, himnos, etc.., pero sin personas; en su esencia es un fiel siervo de las grandes fortunas: todo privatizado, y los lacayos viven para los poseedores de las fortunas. Hablan de grandeza como si estuvieran en la taza de un váter, al menos eso pareció decir.
Introdujo a Ciudadanos, como ese mal menor, ese cuñado guapo que es deseado por suegra y suegro a partes iguales, pero que se olvidan de él, nada más irse. Ahora sirve para las chanzas en la Revuelta, una metáfora de la superficialidad y de la dependencia del capital, pero desnudo de todo lo demás, un proyecto de Estado.
La esperanza de un país que aspira a no ser engullido por la golfería, sería ese partido socialista, que dice Marc Giró que hace y defiende cosas de derechas, pero con una cierta racionalidad.
Lo que no se esperaba es que el conferenciante hiciera una exaltación de la extrema juventud como una fuerza emergente que se quita de todos las cadenas que tienen los anteriores
El elogio a Podemos, pudo venir de su desprecio al considerarle con ideas utópicas de un niño.
Años pasados; pese al tutelaje que han querido hacer por parte de los maquiavélicos Rajoy, no sabiendo nunca nada, ni de marinos asesinos de una población huyendo, ni de policías patrióticos, traidores a su tarea de funcionarios, ni de medicamentos caros que hubieran salvado casos de hepatitis C, pero, claro, hubieran disminuido ganancias de sus comisionistas
Pese al odio, nunca disimulados de un Aznar, taimado urdidor, siempre inocente, de tramas preparadas para la muerte de seres humanos, mientras llena la buchaca propia. Maldad hecha reflejo
Pese a todos los acólitos mediáticos, que hoy se suben al carro al que escupían en un tiempo no muy lejano y, en representación de todos ellos, un García Ferreras, fiel a su amo y desacomplejado jugador de póquer, con aspecto de Robin Hood y cartas marcadas para la traición.
Pese a tantas otras cosas; el chico que miré a través del ventanal y del que habían hecho tamaño elogio.
Se llama Podemos y ha crecido, entre las cientos de aguas turbulentas de la adolescencia pero firme para luchar por una sociedad mejor.
Consecuente con sus ciudadanas, arriesgando contra fuerzas mercenarias, alimentadas por esos mafiosos que, mientras entra su baboso secuaz en un bar para provocar, le dice al jefe de la Taberna "no te lo tomes a mal, es businnes".
Nadie hubiera pensado que se podría subir más de un 50 por ciento las pensiones.
Todos admiten, porque en sus conversaciones son conscientes de lo que pasa, que pagan mucho, comparados con las ganancias de las grandes empresas y banca a las que siempre un estado sólido y cumplidor les da mayores réditos, además de pecuniarios, sociales.
Sólo Podemos se atreve a decirlo de viva voz, incluso aunque sepan que servirá para que esos emporios sigan metiendo más dinero en las pseudo medios periodísticos creados "ad hoc", para introducir un relato que les haga daño.
Ese joven, también Podemos, sabe que la violencia de su juventud no se combate con más violencia. Por ello, Canal Red, un sosías del partido siempre analizó la guerra de Ucrania donde una perspectiva que le ha terminado dando la razón. Europa no debiera haber sido sumisa a un Estados Unidos, que es una fábrica de guerras, a las que dota de sus propios armas y bombas para mantener una sociedad desigual.
El tiempo habrá enseñado a todo aquel círculo reunido allí. A mí el círculo de Quintas, se me aparece lejano para producir una sinfonía que vista a lo que da Ione, Manu, Inna, Irene y tantos otros Pablos que escuchan, estudian y buscan dar sus análisis, nunca desprovistos de su particular visión de la sociedad; siempre honestos para ser recogidos, a veces, como despojos, de esa infame guerra que era imposible ganar sin el dialogo, y al que ahora se atribuye llevado a cabo, por mercaderes que quieren cobrar sus facturas.
No hubo respuestas, sólo la disolución de un conversación a la que el tiempo ha dado muchos matices y la sabiduría de reconocer el valor de la juventud que todas tenemos para reconocer y comprender todo lo que pasa a nuestro alrededor.