El Michael Kiwanuka, "cold little heart" que hoy me han regalado, lo he ido buscando en sus piezas por el camino en el que me reviví en ruta hacia "los gamellones".
En un frío pequeño corazón, con una mañana acelerada, rotas las cadenas con las que nos agarramos a la inacción en este invierno sin nubes.
Podría intentar describir el sentir una ligereza en los pasos, un saludo a unos paseantes y el vivir cada uno de los lugares por donde pase.
Nada tendría la belleza de esta live session de Michael Kiwanuka
Componiendo la belleza de una inmensidad de una hora
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