domingo, enero 03, 2021

Recita Leila para Ada: Curiosidad por Nuestros mayores

 Vaya parece que vas pérdido

- ¡mira quien lo dice!, llevas asomando unos cuántos días y ahora que llega tu momento, te has inventado el día 32 de Diciembre.

- Diras lo que quieras, pero llegas con unas pintas de las más penosas, casi rotas todas tus costuras y pegando bandazos que no auguran un buen final para que entres por el aro que te han marcado.

Estamos aquí, rodeados en un tiempo de nieves que, al fin, llega. 

Es invierno, estás a 900 metros y Sol, anda asomando en su plenitud por otro hemísferio; aquí concede la tregua a la tierra, para que se regenere y renazca exuberante.

Oyendo la queja amarga de los ancianos. Su voz no tiene la fuerza de Leila; pero su tono..., es un viaje a nuestras entrañas: Fueron jóvenes y parece, con nuestros hechos, que apoyamos lo que afirmó un político japones: ¡Qué nos fueramos, llegamos muchos, muriendo, para dejar paso libre a una juventud!

El razonamiento parece ser. si, es en residencias, ¡qué tengan suerte!. Es una industria en crecimiento. Donde el producto es el dinero que aportan, y el envoltorio lo que los gestores tienen que dar, (eso sí, medido)

- Si, están aislados en este tiempo en casa. Si tienen familiares, hijos, nietos, hermanas, más fácil. Si, no los tienen, que se las ingenien.

Aquí Leila, como si estuviera en el Lliure, clama, se eleva, hace temblar los palcos de autoridades, si es que estos quieren lucirse en ellos, o los palcos de las empresas que buscan vender sus excelencias, y les dice, clara en su exposición:

 ¡Ayuntamientos no debéis ceder la responsabilidad a comerciantes y especuladores para que estas, a su vez, parezcan que hacer el trabajo sucio, y ayudan a desaparecer, primero como en un parking; segundo, en su desvanecimiento físico. 

Los servicios públicos sociales son esenciales, porque son para personas, PERSONAS, casi deletrea con su bello acento argentino.

Ciudades grandes, crueles, cobijo de necesidades que deshumanizan el trato. Miedos de mayores, a quien, taimado, se acerca para decirte que compartas piso. 

Lo oscuro y dantesco es que no haya una administración local fuerte para crear viviendas públicas, está en la constitución. 

Me venden que me perdonan impuestos, para hacerme el ignorante de lo que me supondrá pagar la medicina, la educación y el cuidado de los mayores

Y si se hacen dejación, a estas empresas de postales trucadas, para que las personas no sean puestas en juego en monopolys infernales, donde apostadores, crosplayados en "dignos" fondos buitres y  protegidos por, ¡oh que sorpresa! papás, asaltantes en barcos piratas de partidos políticos, les hayan abierto una veta por donde realizar los hundimientos de barcos de la sociedad a la que tan de forma ampulosa llaman PATRIA, ESPAÑA; aunque antes, de forma concienzuda, habrán sacado los tesoro, para sus beneficios propios y por contra, las llevadas a cuevas en islas lejanas a sus superficiales, magnificadas palabras.

En una calle del barrio de Gracia alguien envuelve en palabras que son tela de araña para intentar atrapar a su próxima víctima, mujer mayor, cada vez con menos cuerdas de seguridad que la sustenten aquí, con sus referentes en tierra desaparecidos..

Leila da ahora, una mano a una visitante voraz, a sus 84 años, de gimnasios municipales, ahora cerrados para el mantenimiento de su cuerpo, pero también de su mente en el contacto social que es esencia de su vida; pero tira de la mano de nuestra lectora y la confiesa, tener ganas de abandonar. 

Tantas y tantas trabas. Para reducir su IBI, llamadas con el IVA de la repetición de un sambenito, "aún no tenemos solución para eso". Teléfono que no sabe la importancia humana de esa rebaja de 120 euros. 

Ada,  ¿Cuesta mucho contratar a las personas que les atienda?

¡Qué sería la sociedad si ya la cimentaron! 

Somos porque nos hicimos mayores

y porque fueron, nosotros les debemos

         Llamar, llamar a las puertas de las Administraciones

para que susurren timbres con los que se sientan sino amados, si imprescindibles

         Combatir los periódicos y televisiones de excelencias que proclaman empresas

         Estar para reclamar, desde el diálogo, con la curiosidad para el conocimiento, 

                         Financiar para dar dignidad a quienes nos somos, seremos

                            Con su voz, Leila nos tranporta para atravesar nuestros

                                                   Perito Moreno. 

                             Tomemos el timón, que es intransferible, para evitar los choques

 

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