miércoles, octubre 07, 2020

En el bus

 Es paciencia lo que se necesita para ir por cada una de las carreteras de la provincia de Guadalajara. Pocas he visitado, algunas veces soñé que con la excusa de la piragua, podría ir conociendo cada una de las poblaciones. 

De hecho  un día viajando hacía uno de esos lares de los que había hablado Javier Caballero en su concienzudo libro.

No viajamos por la equidistancia cuando tras tirarse del trampolín en una agua pura y cristalina, te debes enfrentar con quién te anima a quien está en la otra orilla y allí, ves podredumbre y mentiras, en mitad de algún escaparate brillante pero efímero.

Ayer en ese, mi bibliobús, no encontré los textos que yo mismo me pagó y que tan honestos me parecen para la sociedad. Carne cruda se maravillaba de que una grandísima multinacional, todo en exceso, hubiera hecho propaganda con ellos. Es más, se tuvo que justificar. Cuando veo que ese podcast no está, de sintonía escucho los exabruptos de un mercenario; a veces, divertido; a veces, irónico, siempre mefistélico, siempre perverso calculador con las medias verdades como atrayente cóctel. 

Al primero, le escucho pedir ayudar, al segundo las empresas participantes en hecatombes les riegan en recursos. 

¡Qué pare el mundo que me bajo!

CTXT te envía una carta desgarradora, en cierta manera. Para un suscriptor y socio, más dura. Tienes una hora de descanso, tras el humeante café, encuentras tres artículos, precisos, concienzudos en su elaboración. Claro en su mensaje. De alguna manera, se te nubla todavía más la vista.

¿Pena?, No quizás rabia porque gente luchadora como Mónica, Gerardo, Guillem, Miguel, Willy y tantos otros articulistas, en su proyecto se vayan al garete. 

He andado, al subir en otro autobús, he visto, en un edificio de cristal, como se exhibía la impudicia. Un sillón lujoso en formas, ofrecía su micrófono a la desvergüenza inconsecuente. Allí, no hay información; arrojan sus verdades, con odio travestido en glamour

Hoy, en una estantería, buscaré a Tom Joab, quizás Pete Seeger le ponga voz a su rabia contenida en amor al respeto


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