domingo, mayo 09, 2021

La cantidad

 Reflexiona Juan José Millás, sobre el triunfo de la cantidad. No sé cuantas veces me he bañado en el río. En otras épocas daba igual si era invierno, primavera u otoño. Incluso en verano, parecía frio, aunque en Enero con heladas que vestían con su manto las orillas, nos invitaba a estar un poco más atento de lo que solíamos estar en nuestro instinto de supervivencia; quizás la mañana no era el momento en el que estuviera más despierto.

  Dominar al rojo. Antonio Maestre. los dominatrix

  En el Tajo, surgen de las aguas los recuerdos del tiempo que estuvimos bajando, buscando piedras para descansar, viendo buitres pero sobre todo, sabiendo que quienes iban con nosotros nos daban un soporte vital para nuestras inseguridades y que nosotros, les dabamos la cuerda necesaria para que sus miedos se refugiaran en la orilla. 

 Existen muchos actos de aquellos tiempos, también de los de ahora para amarlos y valorar los encuentros vitales que nos van vistiendo nuestra vida. 

Sería una locura prescindir de la embarcación que se te acerca cuando en el agua te sientes pequeño y frágil o cuando, ya en tierra, te abandonan con tus temblores para ir a buscar la pala que se podría esconder en cualquier maleza que la ahogará escondiéndola a nuestras vistas. 

No sería nada inteligente cerrarte a  quienes te enseñan como es la vida y la poca importancia que tienen algunas disensiones, ya sea porque las patatas las has puesto muy tarde o porque te aceleras y quieres que los tomates, en esta sierra, comienzo del Alto Tajo, las heladas pueden ser el traje que te espere para vestirte hasta después del 20 de Mayo.

 En las corrientes que nos mecen o nos manejan por su fuerza en determinados momentos, también el respeto por las disensiones y por ver la vida de muy diferentes maneras. 

 Existen canallas que alaban a quienes masacran a su pueblo, en sus necesidades y proclaman su admiración por los poderosos que no pagan impuestos, en un pais en el que sólo lo pagan el 15%; insostenible esa sociedad. 

   No sé el alcance de estos escritos; llamar a que se rompan cadenas con quienes sometieron a sus pueblos proclaman culpables que les descubrían sus desnudeces no es tarea. E

  Los medios crean las respuestas para quien cree que copiar lo vivido es el estadio para que nada suceda. 

   Simas de odio, que superamos, trenzando lianas que nos hagan buscar los encuentros

 


No hay comentarios:

Siameses y mercader

Siameses y mercader
Zaida, Fernando y