lunes, agosto 19, 2013

En el pueblo

Hacía tiempo que no me reía tanto, pero bueno así ha sido la cosa: Pasé muchos años junto a las gallinas y claro, uno al final las termina entendiendo. El caso es que estaba leyendo, junto al arroyo a Kant, bueno más bien los verbos alemanes, ahora que uno debe prepararse para todo, y en eso que llega una gallina:

Hooooola chicos, ¿qué tal?, uff que calor hace fuera, cuando tenemos que salir a alternar con conejos, pavos y cisnes (¡qué estúpidos ¿no? se creen algo y nos deben todo a nosotros que les ponemos en el candel...uf! no sé como sigue).

Mira que el gallo, marimacho Co tiene que ir a ponerse delante de la representación de las gallinas de todos los corrales cercanos y hemos pensado que como también está cerca la fuente, (donde ya sabéis que poder beber todo lo que queráis, si también comer helados, si, si) pues podíais ir allí y hacer un poquito de ruido.

- Contesta una: jo el otro día, me encontré con la vieja perdiz con la que he convivido y aprendido tanto y me costó cocoricar lo que cocoriqué. Cuando la pudé mirar encontré una  mezcla de pena y desprecio.

- Contesta, (la gallina jefa, esa que si tiene que ir a un lugar donde parece que respeta penas, va, se ofrece y si te he visto no me acuerdo): no me gusta que que te vuelvas un moñas, ya sabes que nos defendemos sin complejos y "a saco", como cantaba nuestra añorada gallina Milla, "a por las otras que son muy, muy gallinas", lo decía a las que venían de otro corral, con lo que era él para lo nuestro,  lo nuestro, lo nuestro,  pero para esas cosas de dominar, era muy poco mirado. Prefería las gallinas agradecidas que las gallinas de su corral, ¡ya veis, esa era la tiita!.

 - Seguía la jefa, con su marcada y estruendosa cadencia esa aprendida en días de lluvia y recogimiento, no olvidéis lo que tenéis y a quien se lo debéis. Y estas cosas son como lo que le paso al mago, Tito, que estaba y ya no está. Así que nada, os esperamos allí. Luego, risitas, y luego piscina, cervecita y a volver cada una a su estancia de la que es dueña.

- (Pensaba alguna aturdida), jo que vergüenza creo que va a ir un familiar porque esta muy enojado.
Va me pongo esas gafas tan chulas y como aquí suelo ir muy recatada, ¡lo bien que manejamos eso!, pues allí me quitó unas cuantas plumas y yuuuuju a desparramar. Además al tiito que siempre fue bueno conmigo siempre le podré ayudar. ¡Tenemos la llave los graneros,,,ja, ja, ja, ja, ja!

Tengo que aclarar que hacía tiempo que no me pasaba; quizás, por haber leído que hoy hace 36 años que murió Marx, (Groucho) y no sé si estoy en la realidad o

- Esperar, esperar, esperar, esperar, espera que si, que viene ella, la desacomplejada, nuestro idolo.

- Hooooooooooooooooola, ¿quien quiere unos caramelitos?

Ahora con este tumulto cualquiera se va a dormir

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