Tonucci, nos ayuda; otros nos venden competición
Jamás el mercado debiera marcar lo que deben aprender nuestros alumnos. Venden mejorar en números y letras y se olvidan que alrededor de un ser humano existen multitud de lenguajes, que además se puede disfrutar intentando aprender a enseñarlos de la mejor manera posible.
Parece triste que después de años incidiendo en la lengua y la matemáticas, se continue aumentando sólo horas de estas materias, sin haber llegado a comprender que una persona puede llegar a aprender a través de muchos caminos.
¿Quién hay detrás de esta venta de resultados?. ¿Favorecen guetos de seres especiales cuando los seres humanos hemos nacido para convivir, cada uno desde nuestro camino pero habiendo conocido al "otro" y habiéndole facilitado los medios para atender su diversidad, sin que eso suponga haberles apartado del diferente?.
Marketing de vencedores cuando la realidad la han construido desde cuotas ocultas, falsa seguridad sin perturbación (a veces estas escondidas desde la más baja ignominia), utilización de los recursos públicos para incluso segregar sexos, cuando el trabajo a enseñar es respetar, aprender a comprender y nutrirse de los diferentes mundos vividos.
Si, maestros, pedágogos enseñarnos, a los que amamos esto, para superar la tristeza de verse superados por las doctrinas.
Maestros que fuistéis apartados, señalados y exterminados por ser maestros y pensar, os llevo en el corazón y huyo del silencio complice que tanto daño hace a esta sociedad.
Es bello ser maestro y enseñado cada día
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