sábado, mayo 11, 2013

Nueva charla de Teresa en Azuqueca, 15M, sobre la deuda

Eramos cuarenta personas, los que hemos estado escuchando a Teresa, su charla sobre la deuda dentro del colectivo que defiende la idea "no debemos, no pagamos", aunque ella, como el grupo que defiende esta idea, se afana en explicar que sí, que se pagará pero lo justo y lo que tenga que ver con algo productivo. Por ahora, este colectivo, sólo ha recibido la penalización por hacer visible esa consigna. ¡Qué pena que el político que ha castigado, no se le haya ocurrido que se haga penitencia mostrando en los diferentes foros la realidad de esta charla (incluso se podría contrastar), llevándole a centro públicos.! ¡Qué oportunidad pérdida de acercarse al juez Calatayud que en algún momento utilizó la pedagogía para penalizar alguna conducta que pudiera ser punitiva

¿Cómo es posible que el Banco Central Europeo este cimentado sobre los bancos privados, no como en Estados Unidos que es un banco que maneja el dinero publico, y que esta situación, se suponga que ese dinero no se lo puedan dar a los paises, sino a los bancos privados del pais, que lo reciben al 1 % y lo prestan al 5%  al pais, por lo cual con cada operación al año, le saca un 4% al mismo país que les ha prestado el dinero para que no quiebren?

- Sabéis que de eso, ya sólo en beneficios han sacado 24.000 millones en los ultimos años, estos bancos. ¿Perverso o criminal?

Sólo en pagar la deuda se gasta más que en los parados en este país

¿A quien debemos esa deuda?

Los bancos, en su mayoría alemanes y frances (48%) han estado prestando a nuestros bancos privados, por mor, en el  ultimo momento a una posesión de papelitos que decían que valían lo que se suponía que se podría obtener por la venta de unas posibles nuevas urbanizaciones.

- Vamos a ver, ¿somos tontos o qué?. ¿Se te ocurre a tí, empezar a dar dinero a alguien que conoces y que sin devolverte lo anterior, te sigo pidiendo dinero?. Vale si tiene unos ojos verdes maravillosos, un  cuerpo de ensueño y sólo pensar en las noches de otoño viajando por todas sus curvas, te hace sentir el escalofrio de su contacto. Pero ya han pasado cinco años, sin ninguna de esas noches, tu cuerpo se ha avejentado y pareciera que sus sonrisas se van repartiendo a rincones donde tu nunca estas. Y eso, ¿ya merecen los 14.000 euros que has prestado a esa persona?

No, por favor, no me mires con esa lujuria que sabes que me encanta, esta vez no compartiré tus pérdidas. Y si eso no lo haces tú por mí, que hemos compartido lecho, ¿vas a admitir que esos bancos privados que han soñado crecer con los más pequeños bancos privados del país y estos con la ilusión de los ciudadanos, reciban el dinero de gente como tú o como yo?

Ellos se regodearon en lo que podían ganar y han perdido, ¿cómo un país, cómo un partido socialista puede contribuir a cambiar una constitución para comprometerse a pagar una deuda que en su mayoría es privada?

¿Hasta cuando puede un pueblo estar cegado por la palabrería de gente que te está haciendo pagar los desmadres de su irresponsabilidad?

Interpreto de David, al final de la charla, que está en nuestras manos cambiar ese dantesco rumbo a la nada, a la más absoluta desesperanza, porque esa deuda es imposible de pagar, como se ha demostrado en otros paises.

Oigo muchas interpretaciones de lo que está pasando; a riesgo de equivocarme me agarro al libro de la vida de Melchor Rodríguez, anarquista español, que veinte años antes de la guerra civil, se los había pasado entrando y saliendo de la cárcel por su compromiso social sobre su visión acerca de una sociedad mejor; por lo tanto, sabía lo que era aquello, y nada más empezar la guerra y los primeros momentos de salvajismo de los rebeldes (como desde Sevilla, se encargaba de enorgullecerse desde los microfonos, uno de aquellos africanistas inhumanos, alli y aquí) y ante las ansias de venganza de algunos ciudadanos que estaban bajo un gobierno, (que luchaba por mantener el orden que se había votado), Melchor luchó por mantener la cordura ante la barbarie. Por desgracia, no fue correspondido desde el otro lado, incluso después de la guerra civil, como reivindica Concha, presidenta del Foro de la Memoria, de su abuelo Saturnino, que aún no tiene placa, junto con otras más de 1.500 personas enterradas en la fosa común de Guadalajara y que mañana, a las 17h., recibirán un merecido homenaje en el cementerio de la ciudad, en el patio 4, pero Melchor y poco a poco tomando el control de la situación provocada por la rebelión, la República protegió, de las más variadas maneras, la vida de derechistas que se habían rebelado.

Cómo escribo, narrar un poco por encima este libro, ha recibido siempre comentarios, de los que conocen la historia, acerca de la impiedad de los que se rebelaron y que durante decenas de años, han seguido teniendo el poder y si había merecido la pena aquel ingente esfuerzo.
Voy por la mitad del libro, no sé si cambiará mucho el contenido del mismo, lo que si sé es que me da fuerza, la memoria de este hombre, Melchor y de tantos compañeros maestros, que fueron sólo eliminados por ser maestros, para defender la dignidad de nuestra lucha. Es largo el camino para la cortedad de nuestras vidas, muchos piden los resultados inmediatos, aunque me da la sensación que debemos mirar a nuestro alrededor y ver quienes son los que nos rodean y a que están dispuestos a renunciar.

Ante ello, aún con la tristeza de ver a los compañeros que se dejan vencer por el desánimo y por ejemplo, aceptan su derrota a la derrota de ver descuartizar un sistema público de enseñanza que ha ido mejorando a lo largo de los años; me convierto en un humilde mensajero que sueña que el ciudadano, despierte y tome conciencia de su propio valor:

- Nunca esclavo de ningún poder,
- Nunca entregado a las palabras mágicas, sino al análisis de lo que es y su poder dentro de la sociedad.
- Nunca deudor de la codicia privada, sino de su conciencia de ciudadano, consciente de su ser
- Nunca vencido en su pequeñez porque se sienta parte de su pertenencia a seres que quieren ser personas (no trabajadores deudores).

Y por ello, Teresa, perteneciente a la PACD, nos propone

- Vivir en una real economía, no bajo una economía financiera
- Discernir que parte de la deuda es ilegitima
- Ayudar para una transformación social
- Denunciar y exigir responsabilidades a quienes han participado desde la política y la economía en este destrozo
- Dar poder a la población para la toma de decisiones

Para ello, acciones prácticas serían

Una fiscalidad progresiva, eliminando las trampas fiscales (SICAV, eliminación del impuesto de patrimonio, etc.).

Lucha eficaz contra el fraude fiscal

Tasa Tobin (si yo pago en mis pequeñas transacciones, ¿porque no un banco en las suyas?

Gracias siempre, por el trabajo ingente de personas como Teresa y David que contribuyen a hacernos más fácil la comprensión de lo que nos rodean. No siempre es fácil, como habréis podido comprobar si habéis llegado hasta aquí.

Nos necesitamos todos, los que lo han tenido siempre claro y los que se equivocaron pensando que progresar un país, significa entregarse a la codicia, para que esta reparta de forma desigual sus migajas. Si eso no lo entienden y no rompen su dependencia de esos poderes y aligeran el peso de los que vagabundean entre sus sedes intentando recibir migajas, habrán perdido ellos y quizás también nosotros. Pero yo si quiero estar entre los que caminamos junto a fuerza de ser pequeños




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