Caer, sin ser pisado

Si ya no resulta practico seguir,
Si analizo aquel increíble caos desde la azotea
Si se callaron, los ruidosos mandobles
Si se acepta que sólo nosotros fallamos.

Entonces, escucha las palabras de los de al lado
coge una escalera, para comprender las voces
indaga porque el sonoro silencio espera
conviértete en un errante investigador

Camina, en charcos, en contra del viento, en atéridos días
para saborear en tí, los pasos de quienes te precedieron
para conocer los errores por los que cabalgaron
para ser humano, obviando a los adivinadores futuros.

Escucha las ráfagas de sus sufragados odios
siente el rechinar de su embridada rabia
escucha las palabras que se escapan en su soberbía
cuando en el tsunami se adelanta la paz, que devorará

Baja donde los comerciales descubren la verdad de los escaparates
donde los voceros, escupen falsas capacidades
mira la cara devorada, la cara desafiante, la cara insinuante
siente cada aliento, y luego sube, piensa y camina sin ser ajeno

Navegastes con vientos favorables, que te escondieron rocas
pisastes aguas fétidas; tus nuevas botas, te escondían lo putrefacto
el calor se hacía eterno y olvidastes que los frios te paralizarían
andabas sin dudas, sobre tapices verdes, en tierras quemadas

Y ahora te crees, que ya entonces todo lo sabías, que entonces
eras el hombre que todo lo otea desde faros de un solo ojo
si eras tú ajeno a dioses, acaparadores, escondedores sin patria

Comprendámonos humanos y no divinos irresponsables