martes, agosto 24, 2010

respeto

Me acuesto y despierto oyendo hablar acerca de la muerte de Carlos Mendo, un tertuliano de Hora 25 en la cadena Ser. Cuando hace unos años alguien me hablaba que esta cadena abría con los maitines de José Blanco, poco menos que pensaba que había entrado en un submundo, donde la inconscencia y la estupidez vagaban a sus anchas. Y recordaba a todas las personas que en estos años he escuchado: Carlos Llamas, Iñaki Gabilondo, Gema Nierga, Miguel Angel Aguilar y tantos otros que me han transmitido el amor a una buena y honesta información y también recordaba a personas como Carlos Mendo, Mercedes de la Merced y algunos otros que desde una posición de derechas, han participado con un señorio grandísimo en diferentes programas.

Dentro de lo poco que sé sobre este mundo, me admira que esta persona estuvieran en la creación de un periódico como "El Pais" que muchos también denigran y tratan de encasillar para de esa manera acentuar la independencia de su criterio con respecto a ese periódico e incluso a todos en general. En estos momentos, por como pensaba, creía que sería un buen tertuliano dentro de algunas de las teles y periódicos que han proliferado como setas (nadie parece preguntarse de donde viene ese dinero), pero sería un insulto por mi parte meterle dentro de esa bazofía que bajo los epitetos de patria, libertad, religión y algunas otras de sus banderas, visten salvajes ropas llenas de insultos, descalificaciones, racismo y fanatismo.

No me gustaban muchas formas de exponer sus ideas, pues se apoyaba en subterfurgios y en medias verdades que apoyaba en una memoria prodigiosa, llena de detalles (para mi gusto con bastante pedantería) y que tuve la suerte de escuchar envuelto en una exquisito respeto a la opinión de los demás y estos por suerte para todos, eran de una brillantez exuberante. Carlos Llamas, con una tolerancia y brillantez que aún me emocionan al recordar sabía capear esos ataques de a veces, la más profunda derecha. Ahora, que no me he acostumbrado, quizás ya por viejo, a escuchar a Angels, a veces he escuchado a Miguel Angel Aguilar desvertir esa dialéctica, con una socarronería que le hacía reaccionar a Carlos Mendo, con más energía; pero desde luego que en un país tan diferente, tan plural existan seres como Carlos Mendo, y que este sepa estar en una tertulia tan no a su gusto, abre esperanza porque no puedo, ni quiero olvidar a miserables que sin ningún respeto por el otro, ha utilizado la mentira, quizás embutidos en los ropajes de su fanatismo, perdonador. Estos quizás piensen que se puede avanzar en un país sin los cayados que pueden ofrecer el que tiene ideas diferentes.

Mi agradecimiento, mi respeto a Carlos Mendo; despertador de la campanilla que me avise de mis posibles fanatismos. Plural y anglofilo cronista, abierto desde su más profunda creencia en la derecha, de la necesaria existencia del otro. Y eso, incluso hoy treinta y cinco años después de una dictadura, muchos poderes ocultos y otros bien a las claras, niegan la existencia de muertos por no ser como ellos. Por no molestar. Terrible, que no aparezca el otro, ¿es por no molestar?

No hay comentarios:

Siameses y mercader

Siameses y mercader
Zaida, Fernando y