viernes, noviembre 25, 2016

tu verso en carne

Se va la vida en el tiempo de la rima
tu cuerpo paseó, abrazado a la poesía
ya, ella no está sola, la calle camina
escenarios sin bridas, florecerán al día

Aliviaste a quienes jóvenes se ofrecían
sin verte, nacen mañanas de tu energía
nos despertaste a ver amor entre ordalías
son inasequiables, mas prendes y alivias
para mostrarles nuestras manos unidas.

Alegría de sentir los tiempos compartidos
pasarón raúdos sus cursos; al verles al timón
hacía estrellas de latidos, velas a sotaventos
amarradas a cabos en manos de corazón
fluyeron las heridas, y amanecías a los encuentros

Nos nacías sin los odios, eso lo dejaste al carcelero
que eterno, repetía su eterna letanía de persona arpía
mira la palma que te ofrece la indomable ambrosía
al otro, siendo dañino y ladino, deshonra le incrimina

Nacen en nosotros tus actos, mueren en él la codicia
es un tirador cuando ladra, y tu sembrador del otro
que se mece por tu poesía; el censor cuchillo blandia
signos de multiples cacerias; y tu amamantaste rebeldía

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