Llamas, estas esas mañanas

Salto de un asiento, en el aplaco mis pasos sin dueño. Aquí bailando agarro a vivires con palabras, dibujos y humores.
A la palabras las trazo con las músicas de seres que saben horizontes de un día investigado; rasgos definidos de matices con mañanas que exploran ojos aviesos de sueños con hechos. Letras con tintas de profundidades que necesitan bombonas que auxilien nuestros pulmones acomodados.

A las personas las paladeo en sus ensoñaciones de horizontes rotos que muestran todo lo que podemos ser si nuestra rebeldía les agrieta sus mundos preparados

Al desenfado, le exhalo esfuerzo para abrir las compuertas de las poderosas piscinas donde les sirenean esclavos que les dicen bípidos cuando en sus bífidos actos encuentran siempre las puertas a los tesoros de sociedades capeadas

En los albores de la semana, nace el fin de semana elaborado para ser conducido con tus sudores abiertos a los posibles que te rodean escondidos en bosques cegados, tantas veces, de ácidos

Compromisos periodísticos

Siete suscripciones que me regalan: eres y te acompañamos con nuestras búsquedas para que nos comprendamos

No, no llega esa lectura que me revolcaría en el placer de haberla recibido.
No, no escucho palabras que bañen la noticia que se encuentra sin olas.
y sin embargo, les apoyo, porque me reconocen ser humano, porque cogen una noticia a la que yo pondría mis vestidos para que nos flirtearamos y la desnudan, de mis trazos y la van mostrando con sus curvas ansiosas que provocan pasión pero también derrapes; con sus pálpitos no sólos de ansias por crearnos únicos por compartirnos, sino por conocernos derrotados en nuestras certezas que nos hacen renacernos.

Ser carnecrudo, es volcarme en la rebeldía ante la putrefacción de la aceptación de la bazofía preparada en dosis de odio hacía mí, receptor rebaño. Ser carnecrudo es revolcarme entre músicas inconformes hacía plenitudes que me burbujean para recibir un día determinado, un programa sobre un país que nos impone comportamientos telúricos de aceptación y sin embargo demostrarnos con llamadas a pantallas de vida que por un lado, los sindicatos clásicos ven la inmediatez de agarrarse a una barra, sin anclajes que nos hundirán en miserias cotidianas que nos harán encerrarnos en nuestros actos ante el poderoso, clamando avisos y miedos contra el diferente que siempre somos nosotros. Por otro lado, un sindicato de muchos unos, en encuentro, nos dirán palabras que no habrán tenido tiempo para explorar y por último, tras otras llamadas, nos subiremos al barco de ecologista en acción que sí, se atreverá a decirnos soluciones sin arnés, dificiles, sin glamour pero con las que zarpariamos para  liberarnos de nuestra esclavitud aceptada. Cuantos días, me son así, elaborados por crudos y javieres que me miran en 15M, que nos proclamaron: Ser, no os hundáis en las miserias de los que repiten en aguas placenteras con lechos de podredumbre.

Mares y ríos

Robinson

Llega este Viernes, para recibir encuentros
ya no buscados, siempre para renacernos
se acercan los SOMos y los ECOOOs,
besos al Sol, para decirnos, sin Eléctricas
Nos amenizan Desolation row en Dylans
nos rodeamos de recuerdos que nos son,
Entre alhambras y mahous ciudades bebibles
imágenes de vidas cícladas porque estamos
caminando sin vernos, los dioses nos forman
si nos delegamos porque la acción, nos atrapa

Temas sin táhur, 1. Si a 80 km/h, pueden morir 365 personas menos. T

¿A quién valoramos? Los platillos van más rápidos con basura estelar, pero evitan doble vía
¿Para que gobernamos? si a libertad, sin responsabilidad, la pueda dirigir el dueño de la muerte
¿Cómo conducimos? Si en mi trayecto, podría suponer 10 minutos, para engendrar controversias
¿Por qué nos entregamos? a impostores que usan su irracionalidad, para deslumbrar en sus espejos
¿Dónde empezamos? cábinas de nuestras vidas, para empezar a mirar los ojos que nos independicen
¿Cúando nos nacemos? despedazamos el monstruo impuesto en las extremidades para guiarnos

La directora General de Tráfico,  Carme Segui, una de las que fueron, anteriormente, nombradas, confirma que lo que propone ahora Pere Navarro, ella lo indico a su ministro de Interior y este lo rechazo, al menos lo insinúa y el no ha querido contestar a las preguntas de la prensa, por motivos electorales.

A la ciudadanía, se la debe respetar, pero se gobierna para imponerse a lo particular. ¿no existiría entonces la libertad?. Bueno los ricos, los fondos buitres son los adalides de la libertad, pero es su libertad. Al ciudadano, todas, debemos contribuir a darle lo necesario para que viva con dignidad. Nunca en razón de los beneficios de un supuesto amante de la libertad extrema (por caerle en su lado).

¿Quién era uno de los que podía haberse salvado?, Nombre repetido, en una cabeza ofuscada
Conducía ya sabiendo que la placidez se instalaría en la mesa receptora de un tomate nuevo
Salía el cocodrilo acechando los sueños de los que se apercibían por regalar un beso al día
Navegaba el tiburón que no llegaba más que a atrapar la silueta de los nuevos mañanas
Tramos para esperar, si mi tiempo lo incendié con las cerillas últimas que eran sopladas

Mis temas. desencadenados del táhur

Concordia

Si, es el parque más conocido de mi ciudad. Si, y aún no lo han cerrado. Para mi, no sé si por la edad, se ha reducido, o es que cada vez le meten edificios más grandes, para seres exclusivos.

A mi, me gusta cuando lo paso de largo; ya pocas veces paro en sus diferentes rincones. Fíjate, que puedo parar en bancos, aunque llegas a ellos, todos de la Concordia y parece que te ponen siempre los mismos pinchos a los que te tienes que adaptar: pegándote el sol, crees oir, estos van a destruir todo (observas a los interlocutores de análisis profundos), sigo, existe mucho espacio libre, y allí está el otro "efecto punzante" los árabes, que se llevan todas las ayudas, que cobran la leche y que nos van a invadir (no, si ellos; no, los de airbnb, ni los que vienen en yates, ni los que ocupan espacio sin pagar impuestos), vaya no falla porque en el siguiente asiento salen imprecaciones sobre si, "ese que no se lava", si "ese de Venezuela", si "ese qué como vas a seguirle si eres docente", si ese Pablo (No soy de iglesias, y menos cuando esta utiliza las ayudas para exclusivizar a las alumnas que recibe; que pueden venir de cualquier país oprimido con el que hacemos negocios, cegados por el oro y por ello, parte de un martes, es tan estúpido para hacer un trece en su popularidad, frotando hasta que aparezca la suciedad en su mediocridad)
  Concordia, es un espacio para estar, desde luego conociendo lo que somos, por lo que nos hicieron. Sus raices chupa de los tiempos, de la memoria. No proclamada desde la pulcritud, porque eso no alimentó a las raices, si no existió.

 A veces, muy recónditos, creo ver bancos con espejos, pero nadie los utiliza. Creo que les han puesto vallas, como al parque sueños, de San Roque. A mi me da que no quieren que al sentarse se observen con lo que son y lo que defienden, porque podría ser que se empezarán a romper los espejos en cristales y cada uno, fragmentado pusiera en evidencia las certezas que les habían guiado.

 Si, al parque de la Concordía, les llevamos ya por sendas imposibles de eludir. A los lados, fuera de su visión, vemos encuentros en praderas, riquezas que nos fueron robadas en nuestra indiferencia, precios abusivos por lo que es nuestro, buitres sin fondo que se apropian de nuestros futuros. Pero eso en este parque no debe ser visto

Se repite

Salir para comenzar,
andar para agotarte
de un lugar quieto
en una ciudad exhausta
en el que comprendías
que frusta expectativas
la base que te alviaba
en los círculos infernales

Mañana te veo, al nacerme
hoy, camino sin mis ríos